Cassany, Daniel. En_línea; Leer y escribir en la red. Barcelona, Anagrama, 2011.

 

DC analiza las metáforas más habituales en el análisis de las Tics. La más conocida es la que distingue los nativos  de los inmigrantes digitales. Creada por Marc Prensky y otros autores, esta distinción establece que los nativos se sienten cómodos con los documentos hipèrtextuales e hipermodales, practican la multitarea, se conectan siempre que pueden son cooperativos, aprender de manera informal, están acostumbrados al intercambio rápido, textos breves, respuestas rápidas. La investigación empírica, sin embargo, desmiente algunas de las presunciones de Prensky. Estas investigaciones indican que los adolescentes no siempre son concientes de sus necesidades de información, dedican poco tiempo a leer los textos digitales completos, son incapaces de distinguir lo fiable de lo que no lo es, desconocen los sistemas de almacenaje y recuperación de datos, navegan por Internet de manera ingenua.

De la misma manera, las investigaciones sobre multitarea muestran que la interrupción súbita de una actividad para pasar a otra incrementa el tiempo necesario para cumplir ambas y el índice de errores. Tampoco hay evidencia que se produzca transferencia en el aprendizaje desde la esfera privada y de ocio hacia la pública y académica. “En resumen, la metáfora de los nativos digitales desvela aspectos relevantes del cambio tecnológico que vivimos, pero transmite presupuestos ingenuos, como que el saber y la destreza vienen de la cuna, que los nativos están sobradamente preparados, que los inmigrantes nunca alcanzaremos esta capacidad nativa o, en definitiva, que el papel y la red son universos incompatibles.” (30-31)

 

Otras metáforas: residentes y visitantes digitales, consumidores y productores…

 

Leer y escribir en línea

 

Los primeros estudios sobre las diferencias entre el papel y la pantalla señalaban aspectos que DC considera “epidérmicos”: la hipertextualidad (saltar de un fragmento a otro, autonomía para armar el texto. Según DC se trata de un rasgo “sobrevalorado”. Sería más preciso hablar de multilinealidad, frente a los textos monolineales en papel. La intertextualidad (los textos se conectan entre sí). La multimodalidad (el escrito digital integra fotografía, video, música, gráficos, etc.). El plurilinguismo, el carácter inacabado de los textos, etc. Pero “…el cambio más trascendental que implica internet es que la lectura y la escritura se producen en línea…o sea, conectados a millones de recursos que aprovechamos para construir significados de manera diferente y más sofisticada.(…) Es superficial que el escrito sea virtual, multimodal o hipertextual, o que lo veamos en pantalla y lo manipulemos con teclado y ratón. No hay mucha diferencia entre leer un informe en papel o en una pantalla sin conexión (fuera de línea). Sí que la hay, en cambio, si el ordenador está conectado a la red (en línea), porque entonces accedemos instantáneamente a multitud de recursos (enciclopedias, traductores, contactos, etc.) que nos ayudan a entender el texto de otra manera, más rápidamente, con más fundamento y confirmación.” (50)

 

La escritura y la lectura digital  implican:

-incremento exponencial de interlocutores y documentos. En la red conectamos con millones de personas y con todas sus obras.

- ausencia de filtros y controles (en la red conviven científicos y charlatanes, span comercial, proselitismo, mensajes personales…)

-homogenización física y contextual. Desaparecen los parámetros contextuales de lugar y tiempo. El autor y el lector tienen que construir mentalmente los parámetros contextuales.

- preferencia de la escritura. Diversificación de la escritura.

- tecnologización. Los recursos disponibles exigen un usuario hábil y experimentado que sepa localizar cada recurso, conozca su interfaz, sepa manipular los comandos, conozca posibilidades y limitaciones.

 

“En resumen, leer y escribir son tareas bastante diferentes si se desarrollan en línea… Hoy leemos y escribimos más que ayer y es más difícil hacerlo y aprender a hacerlo…” (58)

 

La red ha creado nuevos géneros textuales: conversación escrita (Chat) o texto ubicuo (en la web), ha reformulado algunos de los géneros tradicionales (carta, diario persona, etc.).

Se produce también una transformación en la escritura convencional (ideofonemática) donde se altera significativamente la normativa. Se simplifica el código gráfico, se usan nuevos símbolos, se articulan palabras de diferentes idiomas, etc,

“…al margen de que los jóvenes sean más o menos conscientes de este hecho (errores ortotipográficos) la escritura ideofonemática asume el propósito social de discutir el estándar o, en definitiva, de rebelarse contra la norma establecida. A veces se cree perversamente que los jóvenes escriben así porque no saben hacerlo de otro modo. Es falso, sin entrar a discutir las lagunas de corrección que puedan tener muchos jóvenes. El análisis de sus escritos y de las entrevistas con ellos muestra que tienen conciencia de la diversidad de registros, de los valores de cada uno y que usan selectivamente el ideofonemático según la situación y el interlocutor.“ (78)  (…) “…los chicos con más años de experiencia en la practica de recibir y enviar mensajes de móvil, con textos ideofonemáticos y contextos privados, obtenían mejores puntuaciones en tests estándar de lectura, vocabulario y normativa” (80)

 

Cultura digital

 

“Antes de que llegara la red, los chicos se relacionaban puerta a puerta, con sus familiares, compañeros de cale y vecindario. Tenían una cultura local, construida a partir de la interacción con el entorno inmediato, y homogénea, puesto que todos tenían experiencias y conocimientos parecidos. (…) En cambio, Internet permite contactar con personas de todo el mundo, si hay una lengua vehicular y unos intereses comunes, como puede ser el fanatismo por un grupo musical, un cómic manga o un videojuego. Si estos contactos se desarrollan y actualizan a lo largo del tiempo, los chicos aprenden de sus interlocutores prácticas y formas culturales que tiene poca o ninguna relación con el territorio en el que viven. Se conforman redes, comunidades o grupos virtuales con culturas muy diversas y heterogéneas que priorizan los elementos más universales y globalizados y que se desvinculan del contexto físico. Por ello, los chicos que participan activamente en la red poseen unas culturas y unas experiencias comunicativas diferentes” (82)

 

Materia o contenido transversal

 

“Hoy accedemos de manera directa, instantánea y gratuita a muchas de estas tecnologías, que tienen una interfaz simple y unos comandos sencillos por lo que parece muy fácil utilizarlas. Pero tras la apariencia de simplicidad se esconden enormes bases de datos y sofisticados programas informáticos. Es fácil hacer clic y obtener una traducción, la definición o la equivalencia de una palabra o la verificación ortográfica de un texto, pero resulta bastante más complejo saber leer estos resultados, evaluar su calidad y decidir si podemos confiar en ellos o no. … Para poder usar estas tecnologías, tenemos que saber cómo funcionan (sus prestaciones, parámetros o variables, limitaciones) y también debemos poseer una mínima formación técnica (sociolingüística, gramatical, informática). (…) En definitiva, es necesario e incluso urgente que entre en el aula la formación en las tecnologías de la lengua.” (87-90)

 

1-JCT Cognitivo

Material inédito

Título del archivo Word: "Cassany"

Fecha del archivo: 24 de octubre de 2012